EL MAMÓN
El mamón es una fruta tropical rica en vitaminas y minerales
muy adecuada para bajar de peso. No obstante, hay muchos otros beneficios del
mamón para la salud.
Por ejemplo, puede prevenir las enfermedades oculares,
mejorar la digestión de una comida con carne o combatir los parásitos
intestinales.
En el interior, destacan sus semillas, de color negro
brillante. Esta fruta tiene un bajo contenido en calorías y es rica en
diferentes tipos de antioxidantes. Contiene vitaminas A, B3 y C, y minerales
como el potasio, el calcio, el fósforo o el magnesio.
BENEFICIOS
1. Te ayuda a digerir mejor la proteína animal
El mamón o la papaya es conocido por sus propiedades
digestivas. Es efectiva para mejorar muchos trastornos como, por ejemplo, las
digestiones pesadas, las úlceras, el estreñimiento o los gases.
La clave de estas propiedades está en la papaína, una enzima
que solamente está presente en esta fruta. Asimismo, debemos destacar que el
mamón es muy beneficioso cuando comemos proteína animal: carne, pescado o
huevo.
Como no resulta muy digestivo comer fruta en la comida, es
muy útil terminar con esta fruta cuando comemos este tipo de alimentos. Es el
postre perfecto para estos casos.
2. Retrasa el envejecimiento
Otro de los beneficios del mamón es su efecto antioxidante.
Esto se debe a su contenido en vitaminas A y E, selenio y carotenos. Estos
componentes previenen el envejecimiento celular que nos causan los radicales
libres, tanto por dentro como por fuera.
Si queremos prevenir las arrugas y tener un rostro joven,
hidratado y luminoso, podemos aplicarnos el mamón de manera tópica, a modo de
mascarilla facial. Bastará con usarla cuando esté bien madura y dejarla actuar,
por lo menos, 20 minutos sobre nuestro rostro.
3. Combate los parásitos intestinales
En el mamón podemos encontrar un componente que se llama
carpaína. Su principal virtud es la de prevenir y eliminar los parásitos
intestinales que alteran la flora bacteriana, el intestino y la salud en
general.
Las semillas del mamón se pueden licuar junto con la fruta y
tomar como cualquier batido. También se pueden secar, triturar y mezclar con
miel de abeja.
No obstante, si tomamos demasiadas semillas podría
molestarnos su sabor amargo y picante. Recomendamos empezar por pequeñas
cantidades para comprobar nuestra tolerancia y evitar malestares digestivos.
Entre sus beneficios está el sorprendente efecto positivo
sobre nuestra salud ocular. Esto se debe a su variado contenido en
antioxidantes, como la luteína y la zeaxantina, o los beta-carotenos y la
beta-criptoxantina, los cuales son precursores de la vitamina A.
Gracias a estos nutrientes, el mamón previene enfermedades
oculares como las cataratas, el glaucoma o la degeneración macular. Además,
consumir mamón de manera habitual también nos ayuda a proteger la vista del
daño que le causan los rayos ultravioletas del sol.
5. La hoja sube las plaquetas
Las hojas del mamón también tienen propiedades para la
salud. Se ha demostrado en una investigación que el consumo del extracto de
esta hoja puede aumentar los niveles de plaquetas en sangre.
Esto puede ser muy beneficioso para quienes suelen tener los
niveles bajos o quienes han sufrido dengue, como indica esta investigación. Las
plaquetas o trombocitos no son un valor más en el estudio del hemograma de
nuestras analíticas de sangre.
Su función es fundamental para una buena coagulación (por
ejemplo, para detener un sangrado o hemorragia). Además, también están
relacionadas con el tratamiento de la aterosclerosis y la prevención de
infartos coronarios.
Así, los valores normales deberían ser, como mínimo, de
150.000 por milímetro cúbico. Si queremos subirlos, podemos tomar licuado de
hoja de mamón o bien conseguir el suplemento en cápsulas.
Ahora que ya conoces los beneficios del mamón, incorpórala a
tu dieta y cómela a diario, te sentirás mucho mejor. Recuerda que la fruta es
mejor para el organismo si la consumes en ayunas.
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