Des-categorización de los MEDIOS DE COMUNICACIÓN

A pesar de que nuestra selección de fútbol no tuvo
participación en el Mundial de Rusia, igualmente estuvimos prendido a este
evento y apoyando a la selección de nuestra predilección e ir cambiando a
medida que ésta se iba eliminando.
En la parte periodística, nuestro país tuvo
una triste participación que tuvo eco mundial en donde los protagonistas demostraron
un bajo nivel en todos los sentidos como también en comicidad y creatividad.
Por otra parte otros que sí son periodistas han realizado trabajos impecables y
de quienes podemos enorgullecernos.
Hoy día, hablar en algún medio radial o televisiva ya no es
novedad, más aún desde que se multiplicaron como hongos las radios piratas,
evento que deslizó vertiginosamente la fama de todos los medios de comunicación
y pasó a ser una competencia desleal lo cual significó bajar los costos de los
anuncios para no morir todos juntos. Probablemente ahí comenzó la descategorización de los comunicadores que
si se le metiera en una fosa común, no haría ninguna diferencia.

Esa época dista tanto de la realidad de hoy y, aparentemente
ya no volverán esos tiempos. Hoy día, no podemos escuchar tranquilamente una
radio. Los locutores pronuncian cada grosería que da vergüenza ajena, quizás
porque se indigna con las cosas que pasan en las esferas públicas y también
privadas, pero nada puede justificar ser tan polémico, grotesco y de mal gusto,
me refiero a los programas mañaneros que emiten noticias y notas políticas y
afines. Por otra parte, están los programas informales que, son unos criminales
de la lengua española y unos australopitecos en relaciones sociales y
comunicación.
Muchos de estos “comunicadores sociales” apenas leen, no
saben hablar bien ni español ni guaraní, por ahí surgen miles de audios que
recorren por watsapp en donde son blancos de burlas ciertos locutores por su
peculiar manera de hablar. Con una lectura contínua y constante se puede
mejorar la cultura. El carácter se puede controlar para vivir en sociedad.
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